Los que solemos DAR, muchas veces sin que nos pidan, es porque tenemos actitud de servicio, solidaridad, generosidad, compasión. 
Porque de chicos decíamos «Hoy por ti, mañana por mi»…
Pero hay que ser conscientes que no debemos esperar la misma actitud del otro lado como devolución, porque no todos tenemos la misma actitud.
Que en la vida puede haber muchos «HOY POR TI» y que cuando te toca a vos te tengas que arreglar solo.
Suelta y desapegate de esperar que a quien diste, siquiera te lo agradezca, porque cuando llegue el momento en que le toque el «MAÑANA POR TI» (o sea la retribución), no haga lo mismo que vos.
El Universo es el que pondrá a la persona que se hará cargo de balancear la ley del DAR y RECIBIR.
Mientras… debemos seguir DANDO, desapegandonos de las actitudes ajenas, de si lo merece o no, porque es importante que NADA ni NADIE por su actitud de no dar, no retribuir, no agradecer, ¡Nos haga cambiar la nuestra!.
Siempre seremos vistos como buenos cuando damos, no esperemos lo mismo cuando necesitemos del otro y este mire para otro lado. El balance cósmico pondrá todo en su lugar… entonces, relajate y disfruta y no dejes de DAR. Se fiel a tu esencia.